YO NO SOY TONTO

¡Cuéntame por qué como consumidor me consideran gilipollas!

  Se está generalizando el CONSUMO como una forma de sustitución subliminal de las carencias afectivas o de perspectivas religiosas substitutivas a nuestro desamparo como humanos. Seres frágiles, porque el hilo del que colgamos, la VIDA, está pendiente de la MUERTE. Irremediable destino.

De ahí que busquemos "salvavidas". Consumiendo. Todos. Todos nosotros. De tal generalización entre la sociedad, ha devenido el desenfreno.

La demanda sobredimensionada, no puede ser abastecida correctamente por una Oferta. Especialmente por los "servidores o expendores finales". Esa mano de obra barata, poco cualificada e hiperjoven. La epidemia capitalista más tremenda desde la fundación de este sistema económico tan liberal.

Junto a ese mal, otro aún más inquietante: el euro nos ha dejado pelados, y cada final de mes, se vislumbra como una pesadilla cada vez más difícil de superar. ¿Cómo lograr sobrevivir al IPC sin aumento de nuestros salarios?

Veamos algún ejemplín ilustrativo...

 

 INDICE "MÁS ALLÁ de AQUÍ"

 

 

YO NO SOY TONTO

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EL CINEOCIO

A raíz de un comentario sucedáneamente inocente de un coleguita en relación a una jornada ociosa, que resultó inociosa y muy costosa, se tuvo que gestar un manual de actuación cuando la pasta es poca, y las ganas de llegar a todas partes, mucha. Allá vamos.

PALOMITAS CHUNGAS - Fes clic aquí per veure la imatge en la seva mida original

JO NO SÓC TONTU

El otro día va un colegui y me dice:
 
 - ¡Hostias nene! Ayer tenía intención de ir a cenar y luego al cine con mi churri. Malauradamente, me clavaron "la leche" en el restaurante y no pudimos ir al cine. Me quedé sin pasta. ¡Qué putada! Nos conformamos con tomar un cafetito por las inmediaciones y pa casa...
 
 (sin respuesta)
 
 
 (silencio)
 
 
 
 (largo silencio)
 
 
 
 (mi pensamiento: ¡No cine, no mojó!)
 
 
 
 (silencio)
 
 
 
 (finalmente)
 
 
 
 yy de mi boca salió un....
 
 
 
 
 - ¡PRINGAUUUUUUUU!
 
 Aquí tenemos el documento que da solución a este grave incidente contra el ocio personal.
 
Procedimiento cutriférico para CENAR, COMER CHUCHES y VER CINE: TRESxUNO.
 
 Pillas las entradas. Sueltas la pasta. Te duele. Aguante.
 Te dan los ticket con oferta en el reverso del PANS y SU COMPAÑÍA (estos últimos nunca he sabido quienes eran, ¿la santa compaña?) o del BOCATTA (¿A qué vienen esas dos Tes?)
 
 Si no te pones nirvioso, ni tienes escrúpulos para con tu estómago, coges pista y con tu pareja te plantas en cualquiera de esos Restaurantes de Comida Rápida (¡Y una mierda lo de quick!)

¡Cómetelo todo, insensato!


 Te papeas un menú doble, y pagas sólo uno (¡sólo faltaría! con la de bazofia que te dan...).
 Te pones a la cola, y no dejes de preguntarte que qué cojones haces ahí. Sólo una explicación Menos es más. Menos calidad, más ahorro, ¿entiendes?.
 Pues aguanta!
 En cuanto te sirvan la bandejita con tus bocadillitos y bebidas isotónicas, y hagas amago de ir pa una mesa bien pegajosa en su superficie, vuelve. Se habrán dejado parte del pedido por servirte. Seguro que sí. Reclama.
 No te extrañe que no les quede ni tomate ni mostaza pa huntar la masa de pan con cosillas dentro. Suele ser habitual. Lo de las servilletas es otra guerra a parte.
 Y da por hecho que la dolai que te atienda, que no habrá superado la ESO ni de coña, te deleitará con una dialéctica mínima y con un careto que te dirá sin decirlo: "mátame, mátame, mátameeeee.... ¿pa qué coño sigo viviendo?... acaba conmigoooooooo".
 Tú lo harías. Con mucho gusto. Te abstienes y no sabes por qué.

¡Sin publicidad, sin nada. Esta web vive del aire!


 
  Si por un casual la nena o er nene de detrás del mostrador se te equivoca, y te cobra o te intenta cobrar de más, entonces lío.
 A estos robotitos en cuanto no les cuadran los números según su estilo de contabilidad pedestre, y a tí menos porque no entiendes su metodología irracional (¡te quieren estafar!), reza por tu suerte, reza porque en la puñetera trastienda esté el jefe de turno de ese tugurio (tipo que tendrá el ESO y algo más, se supone), porque sino, ese engendro vestido de traje corporativo y con chapita, no se aclarará por mucho tiempo que pase, por mucho que razones o por mucho que les grites y patalees por el suelo. A mí ya me pasó el otro día. ¡Estarás jodido amigo!
Palomitas pa los pollos!


 
 Total, una vez atiborrados, principalmente de pan (no hagas caso de las espectaculares "fotos-Judas" de bocattas, con excedente de condimento que te abordan mientras esperas tu turno... ¡falsas!), y si no te cogen cagarrinitas (no lo descartes), os acercáis a las inmediaciones del CineXin.
 Antes de entrar, paso obligado por la tienda de rigor, la de las chuches.

 

 

Esos productos metabolizados en fábricas. Se llaman chuches y nos tienen a todos con caries, recórcholis!

Chuches, chuches de colores...


 Cargáis con todo tipo de productos plastificados con azúcar, que es lo que mayormente encontraréis, pagáis religiosamente (al fin y al cabo, te saldrá baratito, pues si eres listo habrás picado de todo a lo largo del recorrido de la tienda) y directos pa la butaca.
 Toca visionar la peli, atiborrándoos de palomitas (ahí que pague ella), chuches y algún bebedizo, que por supuesto, recomiendo traer de casa. En el bolso de ella.
 ¡Más ahorro pal bolsillo!
 
 Resumiendo: acabado el film, y gracias a esta estrategia "catalana-garrapata", aún te quedará guita pal cafetito de la salida y si tú y tu parejas tenéis algo que deciros, pues incluso por el mismo precio, tendréis conversación de por medio.
 ¡Menudo chollazo, neng!

 

PD: Sentido homenaje a ese entrañable informático, el manitas.

 

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DALT

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